El viento le golpeaba violentamente en su cara. Estaba en mitad de un claro del frondoso bosque. Notaba la sangre cayéndole por la espalda. Se sentía agotada pero, aún así, se agachó y cogió su cuchillo cuando oyo la voz cavernosa diciéndole:
-Dentro de un momento estarás muerta.
La chica miró al demonio. Los ojos ambarinos de este estaban llenos de ira y de cólera, pero sonreía.
-¿Cómo puedes estar tan seguro?-preguntó la chica con seguridad que en realidad no sentía. No era la primera vez que alguien le aseguraba eso. Pero si era la primera vez que se enfrentaba a un demonio. Sabía que aquel no era un demonio cualquiera. Era el demonio del miedo. La chica siguió mirando a la criatura atentamente. Bajo la luz de Luna, la piel del demonio era de un color gris oscuro sucio. El pelo rubio cobrizo de ella le impedía ver más allá de la criatura monstruosa pero no tenía tiempo para recogérselo.
-Porque eres lo que eres, por eso nunca me venceras.
-Eso es lo que tú te crees-murmuró la chica. Apretó el cuchillo con la mano derecha hasta que los nudillos se quedaron blancos. No se lo pensó más y corrió hacia una muerte segura.
Se ve interesante la historia, espero que sigas pronto, cuídate,
ResponderEliminarbss, Sara.
Gracias Sara eres la mejor. Te prometo que si alguna vez publico algo(cosa improbable)te lo voy a dedicar
EliminarBesos
Gracias, eres un sol.
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